El capital y la colonialidad
- Julian Ledesma
- 9 may
- 10 Min. de lectura
Actualizado: 9 may
Por Julian Ledesma
La conquista de América trajo consigo un sistema inexorablemente violento, desde su génesis hasta sus impactos actuales. La conquista introdujo a la vida comunitaria un nuevo sistema económico: el capitalismo. Este sistema le proporcionó a la colonia un nuevo modo de ver y entender la vida, los cuerpos y el territorio. Mercantilizó y jerarquizó los cuerpos y, en consecuencia, los violentó. Violentó el cuerpo físico, la intelectualidad, la religiosidad y, en el caso de los cuerpos femeninos o feminizados, violentó la soberanía y la libertad de ellos doblemente. En primer lugar, por correrse de la normatividad blanca-europea, pero, por otro lado, violentó su soberanía en el momento que se le impuso una subordinación a la voluntad del varón. Ese momento fue el punto que marcó la historia: cuando las comunidades originarias perdieron soberanía cultural y se les impuso la conformación de estados-nación, para la propia acumulación de sus conquistadores. Incluso, en la actualidad, ese proceso es intensificado en cada momento, pero peor aún, porque la modernidad trajo consigo la legitimidad necesaria que le faltaba a la colonialidad para violentar a los criollos, que, luego, esclavos de su propio sistema, se convirtieron en esclavos. Los criollos, que en un principio fueron la élite de los nacientes estado-nación, se convirtieron luego en pares de los originarios por la colonialidad y la exacerbación del capitalismo, se convirtieron en los esclavos de su propio hijo: el estado.
La conquista creó la norma. Con eso, se configuró automáticamente un sistema binario violento-patriarcal: lo normativo y lo no-normativo. Esta binariedad legitima la violencia contra los cuerpos, porque los jerarquiza. Los mercantiliza porque, desde mi perspectiva, los cuerpos toman dos dimensiones en la conquista: 1) En el caso de las mujeres, la prestación de servicios y la producción de satisfacción sexual hacia los colonos; 2) En el caso de los varones, la producción de bienes y servicios y la defensa del territorio nacional. En consecuencia, identifico un sistema de retrolegitimación. La conquista le brinda los recursos naturales para la producción al nuevos sistema económico -que luego veremos que tiene más dimensiones que la económica-, con ello y con la conformación de los estados se crea la colonialidad y, a su vez, el capitalismo legítima al patriarcado precolonial y exacerba al patriarcado de la vida colonial. Porque enfatizo con la idea de que el patriarcado es un sistema político que se encuentra anteriormente a la conquista. Empero, la conquista le crea mecanismos y entramados, le crea un nuevo círculo para que actúe, más cómodo y con más alcance. La colonialidad exacerba los márgenes del poder, amplía el rango en el que este es impune. Por ello es que expongo la creación de la norma con este fenómeno, porque el poder conquistador actuó y jerarquizó impunemente a los cuerpos.
Payák, una entidad peculiar sin descripción alguna. En el lenguaje de los Tobas del norte argentino este término se refiere y es utilizado como sinónimo de “diablo”. Al Payák se le atribuyen las enfermedades o malicias del monte y de la montaña. Pero, sobre todo me voy a basar en cómo los Tobas le atribuyen al diablo, las muertes en los grandes ingenios azucareros del norte argentinos, lugar donde eran y siguen siendo, explotados laboralmente en condiciones de semiesclavitud y, en algunos casos, de esclavitud. Las grandes fábricas eran el lugar donde los Tobas más le temían al Payák, esta vez, representado por una entidad llamada “El Familiar”, y le temían porque señalan que El Familiar se convertía en un hombre blanco, en un criollo; El antropólogo Gastón Gordillo, en su libro En el Gran Chaco recopila una serie de testimonios de integrantes de diversas comunidades tobas que se extienden a través del Impenetrable, Formosa y Santa Fé. Uno de esos testimonios, daba su experiencia y comentaba que El Familiar cuando salía de la fábrica se convertía en “un gendarme o policía [...] Cuando recorre como persona adentro de la fábrica, nadie lo conoce, [...] El Familiar va recorriendo las calles en camioneta, en Orán” y agrega, “Teníamos miedo del Familiar y también teníamos miedo de la gendarmería”, haciendo notar el claro paralelismo entre estos e igualando el peligro al que se enfrentaban tanto al encontrarse con un gendarme o con El Familiar. Es evidente, la génesis estatal está inscrita con una matriz colonial, racializadora de los cuerpos, exacerbada por el capitalismo como ya lo expuse. Los violenta porque el estado no recompone, el estado daña. Cuando se aísla a una comunidad, cuando lo único a lo que tiene acceso es a los burócratas del estado y a las fuerzas monopólicas del poder económico-empresarial es que se violenta con mayor fuerza y potencia a las comunidades originarias. Incluso, las que más sufren la violencia estatal son las mujeres, puesto que son relegadas al plano de la sexualidad. Sus cuerpos son sexualizados, rapiñados, violentados, lo que genera en la mayoría de casos violaciones en masa a las mujeres de las comunidades originarias. La burocracia estatal así lo decide, así lo legitima. La policía es temida porque incluso muchos de los comisarios son quienes dan las órdenes para comenzar con la caza de niñas tobas y wichis del norte argentino. Afirmando esto, encontramos a Taussig (1980: 18, 129 y 132). quien afirma un paralelismo entre el Diablo y el capitalismo, ambos fuertemente criticados por la acumulación de la riqueza que estos dos entes, defienden. Por una parte, el Payák personificado en los grandes terratenientes del Gran Chaco, defiende la acumulación de la riqueza y la gran propiedad privada, ya que ésta es la esencia de la misma. De la misma manera, el capitalismo defiende la propiedad privada. Por eso anexo la conexión y planteo al capitalismo como el sistema que legitima al Diablo o al Payák, quien le da vida a este ser que se personifica en el hombre blanco según los Tobas. Es decir, el Diablo no tiene sui motus, no tiene una razón de ser, sino que el capitalismo se la da y lo impulsa a reproducirse. Continúe leyendo y reflexionando acerca de aquellos párrafos y luego afirmado por los autores, dí con que el Payák, el Diablo era la personificación tanto de la acumulación exacerbada y vulgar, como del monopolio de la fuerza estatal. Por eso, los Tobas, le temían tanto a él, no porque era un fantasma o un evento paranormal el que se producía, sino porque se enfrentaban a aquel monstruo que les quitó sus tierras, les segregó sus derechos y los relegó a la explotación y a la barbarie.
Sí, la matriz imperial también se encuentra en el núcleo del ADN del estado colonial-capitalista. La esencia del capitalismo inicial fue un capitalismo colonial, fue un sistema que se desarrolló en el contexto mercantilista pero que alcanzó su evolución más extrema en el siglo XIX, en el siglo colonial. El siglo colonial permitió ver y desnudar cuál es la esencia del colonialismo y de las grandes corporaciones. El sistema mundial actúa en base a los intereses de las corporaciones mundiales, que defienden la globalización y la rapiña absoluta de las naciones periféricas. La democracia ya no es más democracia pura sino que es un sistema que permite la decisión popular a través de influencias insertadas en las masas por parte de las corporaciones y los grandes lobbies. La democracia se ajustó a este modo de legislar y los ciudadanos quedaron rehenes de un sistema que ahora, no pueden escapar. Hoy en día, el estado no es un ente garantizador y protector de los derechos fundamentales, hoy, el estado es un ente puesto al servicio del mercado salvaje, las finanzas mundiales y la deuda propagada e infundida por los organismos económicos internacionales.
Las mismas corporaciones desatendieron su esencia y por lo que nacieron. Ya no son más grupos de grandes capitalistas o banqueros que se juntan en la defensa de los intereses privados sino que hoy en día defienden sus intereses, atacan los de la sociedad y, por otra parte, dividen a la sociedad, a la comunidad. Hoy en día, el proceso de la mega globalización convirtió y transformó al mercado desde un sistema de intercambio comunitario a un mega sistema transnacional que tiene cómo principal objetivo la colonización e invasión a la soberanía individual de los ciudadanos. En este sentido, planteo que las corporaciones ya no buscan solamente la acumulación del capital, ya no buscan solamente la generación de riqueza sino que además, buscan el control de las masas. Buscan legitimar su proceso y, para eso es necesario, infundir la idea de que el mercado salva, el estado mata. En consecuencia, los grandes grupos empresariales y de poder no encuentran una legitimación natural por parte de las sociedades, puesto que, es tan salvaje el proceso de extractivización y saqueo de las tierras que hasta las sociedades más capitalistas se replantean la validez y la legalidad de esos actos. El saqueo de tierras, el saqueo de los recursos naturales constituyen no solo una violación flagrante hacia la soberanía política y territorial de los países sino que también es un entrometimiento y una infiltración a la soberanía individual de cada habitante de la región saqueada. La instalación de maquinarias, la instalación de empresas, la instalación de tiendas y la romantización del saqueo, son algunos de los mecanismos que utiliza el poder para legitimar su voraz hambre de riqueza. ¿Cómo es que buscan legitimarse según mi entender? Bajo la complicidad. Si la gente no tiene una posición contrahegemónica y crítica frente al avance y al saqueo, las empresas y las mineras se instalan porque lograron la captación del discurso socio-político.
Desde la conquista de América hasta nuestros días, las distintas poblaciones originarias han sido reducidas a la pobreza económica (lo que nosotros, con una mirada eurocéntrica entendemos como pobreza). Esta “pobreza” producto del proceso de civilización y barbarie, ha permitido, mediante el mercado, la posibilidad de arrodillar no solo a aquellas comunidades, sino también a las poblaciones más modernas a ser esclavas de un sistema excluyente y segregador en materia de derechos. En consecuencia, debemos entender al mercado como una lógica que nos trasciende y agrede constantemente, aquel que se encarga de acaparar y erosionar nuestro paisaje cultural, nuestra cotidianidad. Pero… ¿Qué persona podría pensar que un sistema económico -en principio, solamente económico- que nos permite adquirir nuestros bienes y servicios de manera independiente, es malo y dañino para la sociedad? Sencillamente, porque el mejor crimen, el mejor homicidio es aquel que no parece tal.
El proceso de la conquista actual es un proceso que tiene como personaje principal al capital; quien más tenga de este, mayor status social tendrá. En este sentido, resulta increíble cuando nos ponemos a ver el top de los 50 magnates más ricos del mundo: 1) Bernard Arnault; 2) Elon Musk; 3) Jeff Bezos1, todos ellos unidos por características etnográficas: varones, blancos y estadounidenses y un francés. Es rancia la acumulación de riquezas que se ve. A partir de este índice podemos concluir con dos conceptos generales: 1) Recién en el puesto 8 se observa a un latinoamericano (Carlos Slim; mexicano), hasta el top 7 son todos estadounidenses, varones y blancos y un francés; 2) Recién en el puesto 11 vemos a una mujer (Francoise Bettencourt Meyers; francesa), es decir, en el núcleo del capital, hoy en día, no hay mujeres. Por otro lado, haciéndolo extensivo al resto del top 50, saqué algunos datos: 1) De las 50 personas más ricas del mundo, solo seis son mujeres, es decir, el 88% de la riqueza mundial está concentrada en manos de hombres; 2) De esas 6 mujeres: el 16,66% son de Francia, otro 16,66% es de Suiza y el 66,66% restante son de Estados Unidos; 3) El 100% de esas mujeres son blancas tanto cultural, geográfica como étnicamente; 4) Determinado por la natalidad de cada persona, estos son los porcentajes de concentración del capital y la riqueza por país: A) El 50% de los magnates son de Estados Unidos, el 10% de Francia, el 8% de Alemania, el 8% de China, el 6% de Hong Kong, el 4% de India, el 2% de Austria, el 2% de Canadá, el 2% de España, el 2% de Italia, el 2% de Japón, el 2% de México y, finalmente, el último 2% es de Suiza. Resulta de manual, pero es peligrosamente alarmante que solamente el 2% de las riquezas y ganancias mundiales se encuentren en manos latinoamericanas siendo este, uno de los continentes más ricos en cuanto a recursos naturales y siendo el segundo más extenso luego de Asia. Es necesario reconfigurar la matriz económica que le permita a los países latinoamericanos y, sobre todo a las mujeres, ingresar al sistema mundial.
Abarcar todo el proceso de saqueo de recursos naturales de todo el continente americano, me resultaría imposible en un escrito de este tipo. Por eso, me resulta interesante tener presente e investigar acerca de un país hermano de Argentina, la República del Perú. Perú ha sido uno de los países más afectados por el extractivismo extranjero, culpa que no se exime a ningún gobernante. El relato globalizador y capitalista, allí, ha impactado de lleno. No solo por los efectos medioambientales que genera la minería sino porque se llenó -como siempre- de falsas ilusiones y falsos desarrollos económicos a la sociedad peruana. Este proceso de mentiras y relatos, nos suena muy familiar a los argentinos. Sí, Menem y los 90’. Se dan relatos fundantes y legitimadores de procesos neoliberales los cuales contienen extranjerización de tierras, pérdida de la soberanía política, económica y territorial, saqueo de recursos naturales, grandes impactos negativos en materia ambiental y el único objetivo de estos relatos es uno: ocultar los desastres de todo tipo y, además, colonizar el pensamiento ciudadano haciendo creer que si la macroeconomía crece, la micro también. Lo hemos visto en la experiencia de los dos gobiernos de Menem donde había un gran contraste entre lo vivido por las grandes corporaciones y una economía que supo sostener una estabilidad cambiaria pero en donde al mismo tiempo, fábricas medianas y pequeñas cerraban, obreros eran despedidos y las privatizaciones arrasaban con la calidad de los servicios y con sus empleados. Parece y resulta imperante, seguir aclarando y desmintiendo la idea del “derrame”, así, también parece curioso, tras las vastas experiencias empíricas, aclarar que la minería no genera empleo sino riqueza que se convierte en carne fresca para la fuga de divisas. Así, del mismo modo sucedió y sucede en el Perú, un país donde se finge la estabilidad económica pero la desigualdad es cada vez mayor y en donde las ganancias por la actividad minera de las grandes corporaciones no coincide con los pequeños pobladores de las ciudades e incluso más, con los habitantes de los pueblos cercanos a las minas.
Uno de los argumentos a los que más recurren los dirigentes, economistas y pensadores neoliberales es que este efecto del derrame (la idea de que las grandes inversiones generen riqueza en el nivel individual/familiar de la comunidad) va a generar, en consecuencia, orden en todos los planos de la sociedad. Sin embargo, como expuse en el párrafo anterior, no sólo que esto no es así, sino que las últimas experiencias neoliberales más atroces estuvieron estrechamente ligadas a escándalos de corrupción, narcotráfico y complicidad estatal con el crimen organizado: Menem y el escándalo de la venta de armamento al medio oriente, Daniel Noboa (Ecuador) y la crecida del narcotráfico y el crimen organizado en los últimos meses2 y, por último, el caso que analizaré: Perú, fiebre dorada y del narcotráfico, también.
Desde el año 2006, el Perú se encuentra cubierto bajo una serie de lemas tales como “El Perú avanza” dado la creciente sostenida a lo largo del tiempo del producto bruto interno (PBI) de dicho país. Se habla también del “milagro peruano” dado que se alcanzaron niveles récord de empleo. Este proceso se acentuó y se vió materializado y personificado en el conurbano limeño, dónde una gran ola de centros comerciales atraparon a la ciudad. Esto generó la gran masividad de una nueva clase media: una clase media modernizada, que utiliza tarjetas de créditos y más recientemente, billeteras virtuales. De hecho, desde el año 2002 hasta el año 2010 se vió un incremento del 6% anual del PBI de Perú. Sin embargo, como expuse anteriormente, este crecimiento no se trasladó a la mejora en la calidad de vida de la sociedad, puesto que la mayoría de sus ingresos los derivaron a la compra express debido a la masividad de las campañas publicitarias y de ofertas. Esto, impidió el desarrollo social ya que, según una publicación de Le Monde Diplomatique3, la frenada del desarrollo también se debió a los 37.760 millones de dólares en déficit de infraestructura para el sector de la salud y educación, 73% de los trabajos son informales o no registrados y un porcentaje del 48% en términos de pobreza infantil y desigualdad social. No obstante, en términos generales la pobreza se redujo de un 48,6% en el año 2002 a un 34,8% para el año 2009, que, sin embargo, como expuse arriba, no generaron un efecto derrame en la sociedad, ya que la desigualdad no disminuyó, e incluso, en algunos sectores aumentó: en el mundo rural subió del 0,404 a 0,409 según el Coeficiente de Gini. Esto, lo digo en el marco de que esta creciente económica y desarrollo en términos macroeconómicos se dieron por la actividad minera-extractiva, la cual representa actualmente el 60% de las exportaciones del Perú. De hecho, este orden imperial que expongo en este título, se ve claramente en una entrevista a pobladores originarios de la selva peruana: “Un gobierno que maltrata a las comunidades nativas, que las trata como a animales y salvajes”4. El gobierno cómplice de las mineras de hecho también lo es por acción u omisión del narcotráfico, puesto que casualmente, en la misma época de este exponencial crecimiento económico por el desarrollo y despliegue de las mineras en Perú, se observó que este país fue uno de los principales exportadores de cocaína en América Latina, incluso llegando a superar a Colombia en el año 2008 y 2009, años en los que lideró en un primer lugar la exportación de cocaína.
Está a la vista de todos y quedó expuesto que para alcanzar un status mayor en la sociedad de la colonialidad-modernidad, debes cumplir con ciertas características físicas, de lo contrario, el mismo sistema te deja fuera de juego; jaque mate. Esto se da porque sencillamente el sistema capitalista no es solo un sistema económico, una matriz de producción, sino que además, es una forma de vida, un conjunto de características sociales y culturales. El capitalismo es un sistema político que hace acatar a los estados sus propias leyes, las leyes del poder. El capitalismo y sus reproductores no toleran al otro, no aceptan la posibilidad de que ese status privilegiado se “manche” con una raza contra-hegemónica -concepto que detallaré más adelante-. Rita Segato nos habla del derecho a ser otro, “Es el blanco quien racializa. Es el poder que otrifica. Son las élites que producen los discursos hegemónicos5 [...] El lenguaje de ciertas élites se divide en dos, uno centrífugo, comprometido que busca legitimidad, y el otro lenguaje para el círculo de los mismos, dentro de la vida en los márgenes, de lo que es siempre y por definición no asimilable por la sociedad nacional más que como el derecho a ser otro.6” Por último, para aclarar mi posición frente al capitalismo, no critíco, como expuse, la parte económica, porque creo que en ese sentido es el único sistema que no ha fracasado en materia de avance y progreso económico. Sin embargo, dejo dos puntos para la reflexión que me parecen fundamentales: 1) Entender y desarticular la lógica racial y excluyente de la minorías. En consecuencia, será necesario cambiar el rumbo en el que estamos yendo para obtener un nuevo paradigma y, así, crear nuevos lazos culturales; 2) Entender y desarticular la lógica de la acumulación, la cual, no permite una justa redistribución de la riqueza y de las ganancias. En esta fase salvaje, ya no hablamos de la producción de un país -el PBI- sino que hablamos de las ganancias del mercado mundial. Es tan extrema la acumulación que ya no hay magnates nacionales que acumulan ganancias de una región, hoy los lobbies son internacionales y los grupos de poder funcionan y juegan en favor de las grandes corporaciones transnacionales, que atentan contra la salud de la democracia y desestabilizan, sin duda alguna, la fortaleza de las instituciones que protege a la comunidad para pasar a fortalecer las instituciones no gubernamentales que legitiman la acumulación de los dueños del mundo. Para desarticular estas prácticas, hoy, tenemos un obstáculo: el Estado.
___________________________
Julian Ledesma es miembro del Centro de Estudios de Relaciones Internacionales y de la fundación Alianza por Venezuela. Estudia Ciencia Política en la Universidad de Buenos Aires.
Referencias
1 Forbes. (2023). Las 50 personas más ricas del mundo 2023. Listado Forbes | Estas son las 50 personas más ricas del mundo
2 BBC News. (2024). 4 gráficos que muestran la extensión y el impacto de las principales bandas criminales en Ecuador. BBC NEWS MUNDO. https://www.bbc.com/mundo/articles/cw0llyjqllro
3 Arce Claux Irene. (2011). La fiebre del oro… y del narcotráfico. Le Monde Diplomatique.
4 Entrevista realizada en noviembre de 2009 a una pobladora de Boca Chinganaza, comunidad nativa sobre el Río Santiago, Amazonas. La fiebre del oro… y del narcotráfico; Le Monde Diplomatique.
5 Rita Segato. (2007). La Nación y sus Otros; pág. 172.
Bibliografía
Arce Claux Irene. (2011). La fiebre del oro… y del narcotráfico. Le Monde Diplomatique.
BBC News. (2024). 4 gráficos que muestran la extensión y el impacto de las principales bandas criminales en Ecuador. BBC NEWS MUNDO. https://www.bbc.com/mundo/articles/cw0llyjqllro
Empresas australianas llegan a un acuerdo para desarrollar el proyecto Pingüino en Santa Cruz. (2022). Minería y Desarrollo.
Entrevista realizada en noviembre de 2009 a una pobladora de Boca Chinganaza, comunidad nativa sobre el Río Santiago, Amazonas.
La fiebre del oro… y del narcotráfico; Le Monde Diplomatique. Esther Pineda G. (2019). Cultura Femicida. Editorial Prometeo libros.
Exportaciones Mineras Provinciales. (2022). Dirección de Transparencia e Información Minera con base en Aduana. Ministerio de Economía y (ex de) Producción.
Forbes. (2023). Las 50 personas más ricas del mundo 2023. Listado Forbes | Estas son las 50 personas más ricas del mundo.
Gordillo Gastón. (2006). En el Gran Chaco. Editorial Prometeo libros.
Herramientas para el análisis de la sociedad y el Estado (2021); pág. 141, 142 y 144. Pedrosa F., Deich F., Noce
C. Editorial EUDEBA.
Lendoiro F. Todos por el litio: uno por uno, los nuevos proyectos argentinos y las empresas que están detrás. El Cronista.
Todos por el litio: uno por uno, los nuevos proyectos argentinos y las empresas que están detrás. El Cronista. Segato Rita. (2007). La Nación y sus Otros. Editorial Prometeo libros.
Comments